Reconociendo y aprovechando las oportunidades


Profeta Kevin Leal

Proverbios 25:2
Gloria de Dios es encubrir un asunto; Pero honra del rey es escudriñarlo.
Cuando tú dejas de descubrir cosas, dejas muerto el espíritu. Dios quiere que siempre estés descubriendo, porque esa es la función de tu espíritu y tienes que dirigir ese enfoque para poder descubrir tu destino.

Debes decidir quién eres, descubrir quién eres; tú no eres un fracaso, si no que no has sido descubierto y tienes algo bueno en tu vida escondido. Crees que tienes una medida de éxito y piensas que sólo eso es lo que tienes, pero Dios hoy te quiere mostrar para qué fuiste hecho.

Efesios 5:14-17

Por lo cual dice: Despiértate, tú que duermes, Y levántate de los muertos, Y te alumbrará Cristo. Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor.
Si fueras sincero contigo, te darías cuenta que todavía falta algo en qué realizarte en tu vida, aunque la gente te diga que ya lograste muchas cosas.

En este pasaje, “despertar” es una palabra increíble, no significa estar dormido, sino dirigir en una postura, es recuperarse de una muerte, el salir de la oscuridad, salir del anonimato, de las ruinas, de la no existencia. El despertar significa que no estás consciente de algo, estás inconsciente de la plenitud y del plan de tu vida.
De repente, un día algo ocurre en tu espíritu y te das cuenta de tu propósito, algo nace en ti. Ese día descubrirás el propósito, tus talentos, tus facultades.

Hoy tú vas a despertar. Hay muchos que son buenos cristianos, buenos hijos, pero no han despertado. Hay muchos pastores que han estado imitando a alguien más, pero este día Dios quiere darte una epifanía, quiere alumbrarte.

Muchos de ustedes anhelan redimir el tiempo. Gente entre 30 y 40 años están conscientes que perdieron algo en su vida. Tal vez permaneciste en una iglesia muerta por mucho tiempo, pero hoy sientes cómo algo toma parte en ti, y quieres redimirlo. Si tu ropa se destruye, puedes comprar ropa nueva, pero si pierdes tiempo, nadie te lo puede devolver, excepto Dios. ¿Cómo lo hace? La Biblia dice que redimiendo los tiempos; eso quiere decir “ir a comprar ese tiempo”. Dios te preparó para algo, pero si perdiste oportunidades, él sólo te manda otra oportunidad para que te redimas, sólo escucha para lo que fuiste preparado. Esta mañana vengo para preparar tu mente, y que tus ojos sean abiertos. La oportunidad que perdiste en estos últimos años, el Señor la va a traer de nuevo. La última vez estabas dormido y no la aprovechaste. Tú tienes que tener una ventaja sabiendo que estás preparado para lo que viene, él te va a dar entendimiento divino.
Reconoce las partes individuales que él quiere hacer en tu vida, aprovéchalas. Dios te concede entendimiento divino a través su voluntad para tu vida. Dios quiere hacer contigo lo mismo que hizo con Adán, porque él llevaba a Eva en él, pero no lo sabía.

Lo que tú has estado buscando toda tu vida lo has llevado todo el tiempo contigo. Tú has portado en ti el mismo instrumento de tu promoción, pero no lo has visto correctamente.
Éxodo 3.
Cuando Moisés se presentó delante de Dios, recibió el mandamiento divino de sacar al pueblo de Israel. Dios le preguntó: “¿Qué tienes en tus manos? Ahora su vara se ha vuelto famosa, pero el día antes que la zarza ardiera era sólo un palo de madera, porque lo ordinario se convierte en extraordinario. De repente se convirtió en epifanía, porque lo que llevaba durante toda su vida es lo que Dios va a ungir ahora, es lo que Dios va a usar para darte el cumplimiento en tu vida.

Quisiera decirte hoy que has estado dormido, pidiendo a todo el mundo lo que has llevado dentro de ti; aquello que tú pensabas que era ordinario es lo que Dios va ungir extraordinariamente.

El don tal vez no sea tu llamamiento. Puede que tengas una voz muy hermosa y puedas enseñar; probablemente tu llamamiento sea cantar, pero tal vez no.

Veamos a Sansón y Samuel. ¿Cuál fue el llamamiento de Sansón? El fue llamado a ser juez y su don era la fuerza. Pero, ¿alguna vez Sansón juzgó a alguien? Todo su ministerio lo usó en su don, pero nunca en su llamamiento. Muchos son como él; usan el don, pero no usan su llamamiento. Te pierdes el propósito de tu destino por tu don. La palabra “don” significa en el griego “carisma”. Y “llamamiento” significa “vocación”. Tu don sirve para apoyar tu llamamiento.
Samuel fue llamado a ser juez, pero ¿cuál era el don de Samuel? El profetizar. ¿Vemos a Samuel en algún momento juzgar? Al culminar la vida de Samuel, nada había cambiado en Israel, y al terminar la vida Sansón, tampoco.

¿Te estás moviendo en tu don o en tu llamamiento? Jamás irás más allá sólo con tu don. Has tratado de oficiar en su iglesia o en tu célula con tu don, pero hoy Dios quiere despertarte. Dile: “Espíritu Santo, muéstrame mi llamamiento”.

Si realmente no lo entiendes, vas a tener un éxito negativo. Porque no sólo te resistiría la tierra, sino Dios mismo lo haría. El te ama demasiado para que seas exitoso en lo equivocado, pues vas a destruir tu familia y tu éxito.

Génesis 1:26-28
Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.
Se le denomina el mandato de la creación. Todo ser humano tiene el mandato de la creación tejido en él.
Yo no confío en alguien que no sea ambicioso, porque la ambición va de la mano con la unción. Algunos de ustedes no son agresivos, porque son cristianos buenos, van a la iglesia, tienen su célula, sus amigos. Lo que estás es dormido hasta que no te vuelvas ambicioso.

La palabra “sojuzgar” significa “investigar e innovar”. Después que Adán y Eva pecaron, las dos cosas que cayeron en el ser humano fueron temor y vergüenza y desde ese día, todo ser humano tiene que lidiar con estas cosas. El temor y la vergüenza empiezan a identificarse cuando te lanzas a lo desconocido o cuando te mandan a hacer algo que no has hecho.

Génesis 3:17-19
Y al hombre dijo: Por cuanto obedeciste a la voz de tu mujer, y comiste del árbol de que te mandé diciendo: No comerás de él; maldita será la tierra por tu causa; con dolor comerás de ella todos los días de tu vida. Espinos y cardos te producirá, y comerás plantas del campo. Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás.

Pregunto: ¿Tu tierra está maldita? ¿Estas tú maldito?
La tierra sigue siendo maldita, pero yo soy bendito. ¿Cómo puedes revertir la maldición? El carro, la bombilla, el avión, todos estas cosas son experimentos, eso es lo que hace que se revierta la maldición.

Solía ser que cuando el Sol se ponía, los trabajadores tenían que parar de trabajar, pero ahora podemos trabajar 24 horas al día. Porque alguien inventó la bombilla.

Si importar de dónde eres, vas a regresar a la tierra que está maldita, pero tú estás bendito y vas a indagar, investigando para revertir esa maldición.
Una talla no sirve para todos. No sé de dónde eres o qué es lo que está aconteciendo en tu gobierno, pero cuando regreses a casa, seguirás en la misma condición, pero tú no estás maldito. Pide al Padre una innovación para revertir la maldición. Y no sólo hacer uso de tu don, sino también tu llamamiento. Muchos están dormidos a su verdadero llamamiento.

¿Estás funcionando en tu llamamiento o sólo en tu don? ¿Eres un Sansón o eres un Samuel? Acuérdate que una talla no sirve para todos. El 80% de graduados universitarios nunca consiguen un empleo en el ámbito laboral que estudiaron. Estudiaron para psicólogos y ahora son vendedores, eligieron su carrera por su don, pero eso no es lo que ellos son hoy. Dios quiere poner un despertador masivo. Muchos no han entablado el éxito porque tratan de ser otra persona distinta a la que son. El te diseñó de cierto modo, te hizo para operar y para fluir de cierta forma.

Mateo 13:24
Les refirió otra parábola, diciendo: El reino de los cielos es semejante a un hombre que sembró buena semilla en su campo;
Estás sembrando en tu campo, muchos de ustedes no están es su campo. Estás haciendo cosas porque las tienes que hacer, pero no necesariamente porque sea tu área.

Debes averiguar cuál es tu semilla, su nombre y tu campo. Cuando halles esto, todo lo demás cambiará.

El lugar donde estás es importante; tienes que descubrir cuál es tu campo, quién eres. Eres una buena tierra.
Mateo 13:23

Mas el que fue sembrado en buena tierra, éste es el que oye y entiende la palabra, y da fruto; y produce a ciento, a sesenta, y a treinta por uno.

Dios nos ordena sembrar la semilla en una buena tierra. Pero, ¿qué es buena tierra? Porque hay cuatro distintas siembras y las primeras tres no fueron buenas. Se sembraron en una mala tierra, pero no puedes lanzar la semilla al azar, tienes que discernir cuál es la buena tierra. Hay dos elementos para la buena tierra: tu perspectiva acerca de Dios, en cualquier circunstancia. Sin importar el diagnóstico que te dé el doctor, tú siempre sigues diciendo: “Dios es bueno”.

¿Ha oído a cristianos que dicen: por qué Dios permitió esto? ¿Por qué ahora no hace nada? Es porque no creen que Dios pueda hacerlo.

Tienes que creer con todo tu corazón que El es bueno y su misericordia es para siempre.
El segundo elemento es verte a ti mismo como una buena tierra, porque tus pecados han sido cubiertos. No sólo Dios es bueno, yo también soy una buena tierra. Creer que eres hecho a imagen de Dios, porque él puede invertir en ti.

El 75% de las personas que están en la iglesia no creen que Dios es bueno, y el 85% de las personas tiene miedo. Tienes que entablar una relación de buena vida.
Es tan sencillo, pero demasiadas iglesias han estado sembrando las semillas por años en corazones que no son buena tierra.
Un día le pedí a Dios que me diera cantos de adoración en mi vida. Pero estaba recostado y empecé a escuchar una música muy especial que nunca he vuelto a escuchar, era tan buena que me quería levantar para ir a buscar de dónde provenía la música, pero cuando me levanté, ya no se escuchaba. A la tercera vez de esto, me quería levantar, sentí cómo salió algo de mí y vi una biblioteca con libros tan grandes empastados de cuero. Estaba dividido en dos partes; del lado derecho, todo estaba lleno y del lado izquierdo, estaba vacío. En ese momento, pregunté: “¿En dónde estoy?”. Y me respondió: “Estás en mi biblioteca”. Pregunté nuevamente qué había; él me dijo: “Aquí están los cantos, los inventos científicos; toda cosa creada estaba en esa biblioteca, y en el lado izquierdo estaba vacío, porque era el espacio de la última generación, pero había libros. En ellos estaban los nombres de las personas que nunca buscaron nada.

Y luego me dijo: “Tú viniste por música, ¿verdad?” Yo le dije que sí y me mostró los discos y me dijo que los tomara. Sentí cómo se metían en mí. Luego, regresé a mi cuerpo. A la siguiente semana, yo empecé a estudiar guitarra y a cantar.
Dios tiene experimentos científicos, soluciones para cada problema imaginable, y todos tienen libre entrada a esa biblioteca.

La tierra está maldita, tierra con guerra, hambruna, enfermedad. Pero nosotros somos los redimidos de Jehová, podemos revertir la maldición. Van a descubrir cómo sanar el sida. Dios no puede bendecir a perezosos; tú tienes una tierra de oportunidades. En el huerto no existían los espinos. En el corazón de Dios está tomarnos a cada uno y meternos en la biblioteca del Señor.

Varios de ustedes pensaron que la tierra estaba bendita, pero por eso, Dios te plantó en la tierra porque está en tinieblas, pero a ti te llama a ser luz. Tú te convertirás en la solución, serás la epifanía de tu país.

Lo que tú necesites, la respuesta la hallarás en la biblioteca de Jehová.