No podemos hablar de conquista hacia afuera, si antes no enfocamos el perfil oculto del Intercesor, puesto que esta es el área dentro de la que se forja el verdadero carácter del Intercesor.
Como dice John Maxwell en su Libro “21 Reglas para un Liderazgo Eficaz”, “Carácter es más que hablar”, Yo diría (inclusive) más que orar también. En los últimos años, he conocido líderes (Inclusive apóstoles), que hablan de algunos temas con mucho ruido, más que lo que viven o han vivido de dichos temas. A la hora de presentarnos como siervos de intercesión, en el determinado momento de tratar de entrar a incursionar en el territorio del enemigo, tenemos que saber que: Primero que todo. Nos hemos conquistado a nosotros mismos internamente. Los Líderes no pueden ir más allá de los límites de su carácter. Hasta aquí el comentario de Maxwell.
No debemos olvidar que cuando hablamos de Carácter, nos referimos a la Personalidad interior de cada individuo (a nivel del alma), mediante la cual, reflejamos la imagen externa de lo que en realidad somos y expresamos a través de la conducta diaria.
Luego Carácter, nos habla de la personalidad, mientras que Característico, nos habla de la manera en que nos conducimos. Nosotros como Intercesores, para poder lanzarnos a la conquista de las naciones oprimidas por los principados y potestades de los aires, necesitamos primero que todo, conquistar el Carácter de Aquel de quien se dice que es: “Imagen misma de de la Sustancia del Padre”. El Hijo que vino a mostrar al Dios Invisible. Por cuanto el Hijo es a la vez Personalmente distinto De, y con todo literalmente Igual a, Aquel de cuya Esencia Él es la Personalidad Visible…Él es la Imagen del Dios Invisible, según Colosenses 1: 15; del cual debemos adquirir el Carácter, para poder reclamar las naciones a Él concedidas según el Salmo 2: 8.
Él es la Palabra por la cual fue hecho el universo. Hebreos 1: 2; la Imagen de Aquel a quien ninguno de los hombres ha visto jamás. Juan 1: 18; E Hijo, respectivamente. Cristo es la viva representación visible y manifestación de Dios a los seres creados, Él es la Forma interior que debe ser reflejada por el ser humano redimido. Romanos 8: 29 nos lo refiere así; Pues, Juan nos dice, que: “Como es Él, así somos nosotros en el mundo. 1 Juan 4: 17b; puesto que sólo así, podremos ser absorbidos por Su cuerpo Glorificado, a fin de que podamos obtener Su semejanza en nuestra glorificación, física. Según Filipenses 3: 21; y 1 Corintios 15: 49-53.
Quién es y qué hace un intercesor en su vida privada de oración
El intercesor serio y efectivo, es aquel que como el Señor Jesucristo, se preocupe por que otros entren en su esfera de relación, y se mantengan allí. Juan 17: 6-24.
Luego INTERCEDER es ocupar el lugar de otro delante de Dios, el diablo o los demonios para procurar su liberación de situaciones que le marginan de la Presencia correcta de Dios, como en el caso del joven Daniel, que siendo muy jovencito fue llevado a Babilonia en el 605 a. C. Y durante 3 años resistió el impacto de la cultura y religión babilónica. A los 80 años fue regresado a Jerusalén en el 536. a. C. habiendo estado bajo el reinado de Nabucodonosor, Dario el Medo y Ciro el Persa intercedió por su pueblo. Daniel 9: 1-18.
Luego el que INTERCEDE , es alguien que a aprendido a conseguir las cosas mediante diálogo amistoso, seguro de conocer el carácter del Dios al cual ora. Génesis 18: 17-33; especialmente el versículo 25. Esta actitud en Abraham indicaba que conocía bien el sentir de justicia de Dios, en el cual confía.
La relación íntima, insustituible, impostergable con el que llama ¡Jamás podrá relegarse! Es el oxígeno invisible del Intercesor. Podemos sustituir la relación de Koinonía, confundiéndola con las demandas propias del alma en conflicto por la obra. Y como Moisés hablar cara a cara con Dios, para exigirle irrespetuosamente, Éxodo 33: 11-14, y al final no participar del disfrute de la relación. Lo mismo que con Elías, podemos platicar con Dios lo concerniente a situaciones de presiones personales por la Obra; Y al final ser sustituidos por otros, antes de que cumplamos fielmente nuestro tiempo. 1 Reyes 19: 9-15, Como Jeremías podemos creer que estamos en el circulo de intimidad, y sin embargo, estar descarriados, alejados y necesitados de restauración. Jeremías. 15: 19.
Se puede estar en una labor y sin embargo, no saber cuando la misma, ha entrado en otros niveles espirituales. Durante la Década de los 90, el Espíritu Santo nos introdujo a realizar actos proféticos, a declarar proclamas de posesión de territorios, naciones y Continentes. Y sin embargo, todavía no entender que desde el inicio del Tercer Día de Oseas 6: 2. La logística de la guerra espiritual en todos los frentes de batalla ha pasado a otros niveles de conquista, por cuanto: Prevalece más, el consagrar las personas, la tierra, los montes, los Continentes para el uso y servicio del Dios Todopoderoso ungiéndolos con aceite, en actitud de Alabanza y Adoración.
Ciertamente la Iglesia a entrado a nuevos niveles en la Intercesión, y pareciera ser que algunos de los Líderes Continentales no se han dado cuenta de que estamos en otro estilo de posesión de territorios. La Intercesión Profética para la conquista de los Continentes, es de Adoración que exalta al Glorificado. La batalla final contra el ocultismo es de desalojo y notificación por el ejército de ocupación de Joel 2: 10, tomando los Intercesores de Gobierno (Apóstoles y Profetas Generales), el firme compromiso de Efesios 3: 10: “Para que la Multiforme sabiduría de Dios sea ahora (Tercer Día) dada a conocer por medio de la Iglesia a los principados y potestades en los lugares celestiales”.
0 comentarios:
Publicar un comentario