el León de la tribu de Judá, la Raíz de David
Cachorro de león, Judá; De la presa subiste, hijo mío.
Tenemos también la palabra profética más segura
Porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos HOMBRES DE DIOS hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.
Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección y la vida
Pero levantándose Pedro, corrió al SEPULCRO; y cuando miró dentro, vio los lienzos solos, y se fue a casa maravillándose de lo que había sucedido.
Porque en él fueron creadas todas las cosas
El primer ser viviente era semejante a un león; el segundo era semejante a un becerro; el tercero tenía rostro como de hombre; y el cuarto era semejante a un águila volando.
He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo
El sol se convertirá en tinieblas, Y la luna en sangre, antes que venga el día del Señor, Grande y manifiesto
CAMPOS DE GUERRA ESPIRITUAL
Francis Frangipane
Tengo dos preocupaciones.
La primera es nuestra necesidad de sabiduría. Hay un antiguo proverbio europeo que es digno de atención. Dice: “La edad y la perfidia siempre derrotarán a la juventud y al celo.” Antes de comprometernos en la guerra espiritual, deberíamos saber esto acerca de Satanás: es un enemigo viejo y extremadamente pérfido. Por otra parte, la fuerza de casi todos los cristianos está sobre todo en el idealismo y en un fervor que no se ha puesto a prueba. No es necesario que pase mucho tiempo, por lo general de cinco a diez años en el ministerio, y casi todo el celo se habrá desvanecido. Imperceptiblemente, el llamado ministerial se ha deteriorado pasando de un caminar con visión a un mero oficio.
Sucedió que el celo, por sí mismo, desafió la falsedad del infierno y perdió. El brillo de la visión juvenil se empañó bajo los negros nubarrones de los implacables ataques satánicos. Con el peso del desaliento y la frustración creciente, se aumentaron los términos medios y la liviandad, y con ello vino la iniquidad y la atadura espiritual.
Pero el villano verdadero no ha sido el pecado, sino la ignorancia. Metemos al diablo en una caja doctrinal y esperamos que se quede allí. No lo hace. Socava las relaciones y nuestro amor se torna desconfiado y cauteloso. Nos resiste en la oración y nuestra fe se debilita. La desilusión se ha instalado. Después de pasar mucho tiempo con pastores que están en esa lucha, he visto un rasgo común en la mayoría. Fracasaron en discernir los ataques del maligno. Quedaron desprotegidos contra un enemigo viejo, mañoso y lleno de falsedad.
Jesús preparó a sus discípulos para todo, inclusive para la guerra espiritual.
Le vieron expulsar demonios; ellos claramente sabían que el diablo era real. De
hecho, les mandó hacer lo mismo. Pero antes de enviarlos, les ordenó ser sabios
y prudentes “como serpientes”, pero llenos de inocencia y sencillez “como
palomas” (Mateo 16:10). Esta fusión de la sabiduría divina y
la sencillez de Cristo, es la clave de toda victoria
espiritual. Ciertamente, podemos derrotar al enemigo, pero la prudencia debe
preceder a la batalla y la virtud debe ir antes del triunfo.
Debemos aprender los caminos del Señor, lo que significa que debemos pensar con sabiduría. Y debemos tener un corazón puro, para que podamos ver a Dios y ganar discernimiento. Ciertamente, es la falta de discernimiento lo que nos ha vuelto vulnerables al ataque satánico.
Con respecto a mi segunda inquietud, permítanme decir que en una guerra exitosa no hay atajos; los atajos son sólo modos de hacerla más larga y más peligrosa. Un camino hacia el peligro es entrar en la lucha mientras se está cegado por la presunción. Cuando se trata de una batalla espiritual efectiva, es necesario considerar el cuidado como la esencia de la victoria.
En cualquier plan espiritual eminente donde nos imaginemos estar, recordemos que Adán se encontraba en el Paraíso cuando cayó. Antes que nuestras experiencias religiosas y el aumento de nuestra sabiduría nos vuelvan confiados en exceso, recordemos que aunque Salomón escribió tres libros de la Biblia y en verdad contempló la gloria de Dios, aun así cayó. Sí, inclusive en nuestra más profunda adoración al Todopoderoso no olvidemos que en un pasado remotísimo Lucifer mismo estuvo una vez en el cielo, derramando alabanzas a Dios.
Todos hemos visto a muchos que han caído. Jesús advirtió que el amor de muchos se podría enfriar. No presumamos que eso no nos puede suceder a nosotros. Nuestro enemigo ha estado engañando a la humanidad por miles de años. En cambio, nuestra experiencia es apenas de un breve momento. Es sabio reconocer que no sabemos todo lo que se debe saber con respecto a la guerra espiritual.
Por tanto, sé firme, pero nunca insolente o arrogante en tu vida de oración. Usa tu autoridad espiritual administrándola bien, compasivamente, pero nunca en forma presuntuosa. Multitudes de cristianos con buenas intenciones pero ignorantes se han acercado al enemigo en actitud de petulancia y han sufrido en gran manera por eso. Estudia varios libros y busca la confirmación del Señor para tus estrategias. Como está escrito: “Los pensamientos con el consejo se ordenan; y con dirección sabia se hace la guerra” (Proverbios 20:18).
Tres campos de batalla: la mente, la iglesia y los lugares celestiales. Hay otros campos o sub categorías de guerra espiritual; no obstante, estas son las áreas en las que la mayoría de nosotros enfrentaremos conflicto.
Una palabra final. Algunos lectores servirán como instrumentos para volver sus ciudades a Dios. La promesa del Espíritu dice: “Una pequeña ciudad y unos pocos hombres en ella; y viene contra ella un gran rey y la asedia y levanta contra ella grandes baluartes; y se halla en ella un hombre pobre, sabio, el cual libra a la ciudad con su sabiduría; y nadie se acordaba de aquel pobre hombre” (Eclesiastés 9:14-15).
Mientras muchos predicen la destrucción de la patria y el colapso de nuestras ciudades, no han tenido en cuenta el poder de Cristo en nosotros. Mas recuerde: “Mejor es la sabiduría que la fuerza y...mejor es la sabiduría que las armas de guerra” (Eclesiastés 9:16,18).
Debemos aprender los caminos del Señor, lo que significa que debemos pensar con sabiduría. Y debemos tener un corazón puro, para que podamos ver a Dios y ganar discernimiento. Ciertamente, es la falta de discernimiento lo que nos ha vuelto vulnerables al ataque satánico.
Con respecto a mi segunda inquietud, permítanme decir que en una guerra exitosa no hay atajos; los atajos son sólo modos de hacerla más larga y más peligrosa. Un camino hacia el peligro es entrar en la lucha mientras se está cegado por la presunción. Cuando se trata de una batalla espiritual efectiva, es necesario considerar el cuidado como la esencia de la victoria.
En cualquier plan espiritual eminente donde nos imaginemos estar, recordemos que Adán se encontraba en el Paraíso cuando cayó. Antes que nuestras experiencias religiosas y el aumento de nuestra sabiduría nos vuelvan confiados en exceso, recordemos que aunque Salomón escribió tres libros de la Biblia y en verdad contempló la gloria de Dios, aun así cayó. Sí, inclusive en nuestra más profunda adoración al Todopoderoso no olvidemos que en un pasado remotísimo Lucifer mismo estuvo una vez en el cielo, derramando alabanzas a Dios.
Todos hemos visto a muchos que han caído. Jesús advirtió que el amor de muchos se podría enfriar. No presumamos que eso no nos puede suceder a nosotros. Nuestro enemigo ha estado engañando a la humanidad por miles de años. En cambio, nuestra experiencia es apenas de un breve momento. Es sabio reconocer que no sabemos todo lo que se debe saber con respecto a la guerra espiritual.
Por tanto, sé firme, pero nunca insolente o arrogante en tu vida de oración. Usa tu autoridad espiritual administrándola bien, compasivamente, pero nunca en forma presuntuosa. Multitudes de cristianos con buenas intenciones pero ignorantes se han acercado al enemigo en actitud de petulancia y han sufrido en gran manera por eso. Estudia varios libros y busca la confirmación del Señor para tus estrategias. Como está escrito: “Los pensamientos con el consejo se ordenan; y con dirección sabia se hace la guerra” (Proverbios 20:18).
Tres campos de batalla: la mente, la iglesia y los lugares celestiales. Hay otros campos o sub categorías de guerra espiritual; no obstante, estas son las áreas en las que la mayoría de nosotros enfrentaremos conflicto.
Una palabra final. Algunos lectores servirán como instrumentos para volver sus ciudades a Dios. La promesa del Espíritu dice: “Una pequeña ciudad y unos pocos hombres en ella; y viene contra ella un gran rey y la asedia y levanta contra ella grandes baluartes; y se halla en ella un hombre pobre, sabio, el cual libra a la ciudad con su sabiduría; y nadie se acordaba de aquel pobre hombre” (Eclesiastés 9:14-15).
Mientras muchos predicen la destrucción de la patria y el colapso de nuestras ciudades, no han tenido en cuenta el poder de Cristo en nosotros. Mas recuerde: “Mejor es la sabiduría que la fuerza y...mejor es la sabiduría que las armas de guerra” (Eclesiastés 9:16,18).
PASTORES QUE BEBEN ALCOHOL
22:23
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BEBER O NO BEBER ALCOHOL
Por David Wilkersón (Archivo)
Esta nación rápidamente se esta convirtiendo en una sociedad
empapada por muchos ciudadanos intoxicados. Ahora mismo, el alcohol es el
becerro dorado moderno, y millones de personas, jóvenes y viejos, hombres ,
mujeres han sido seducidos por esto.
El abstemio, los prohibicionistas y todos aquellos que por
años han peleado contra esta inundación de bebidas han sido burlados hasta que
dejaron de existir. Nos reímos para escarnecer a las pequeñas damas anticuadas
que salían a quebrar los barriles de whisky y cerraban barras y lugares
parecidos, y hacían votos de abstinencia
Nosotros los liberados modernos, hemos convertido la bebida
en algo popular. Ahora se considera sofisticado, urbano, y en onda beber
socialmente. Trate de decirle “No” a la azafata del avión que te empuja la
bebida desde que abordas hasta que desbordas del avión. “¿Qué quieres decir, no
bebidas?” Ella te mira como si fueras algún loco por rechazar una bebida
gratis.
En la actualidad, la
gente se ofende cuando rechazas una oferta de bebida complementaria. Ellos
tratan de hacerte sentir impropio porque no te unes a ellos, o que estas
poniendo una actitud “mas santa que los demás.”
“No estés con los bebedores de vino,…” (Prov. 23:20).
Para mí, la verdadera tragedia es que muchos que se llaman
“Cristianos” ahora están bebiendo. Yo les llamo “santos que sorben,” porque así
es como todo comienza – un sorbo a la vez.
Existe un nivel alarmante de alcoholismo y bebidas fuertes
en círculos cristianos en Europa. ¡Ellos se emborrachan! ¡Ellos no son
moderados! Ningunas de sus excusas sirven. Y que falsedad en los cristianos
Americanos que beben “solo en Europa.” ¡Ellos no tocan una gota aquí en los
Estados, pero ellos creen que es “gracioso” unirse con los hermanos allí y
sorber unos cuantos!
Justo hoy, una de mis estudiantes, una alcohólica
convertida, me contó como ella se volvió una borracha. Sus padres la enseñaron
a beber moderadamente. En fiestas, cumpleaños y cuando llegaba visita, todos
participaban de una bebida social. La servían con la comida. Ella admiraba y
amaba a sus padres. Ellos despreciaban la borrachera, sin embargo, tenían un
bar en la casa.
Una encuesta reciente reveló que el 81% de todos los
Católicos ahora beben y un 64% de todos los Protestantes. Estas sorprendentes
cifras siguen aumentando cada mes. La actitud permisiva hacia la bebida social
esta invadiendo progresivamente los círculos conservativos de la iglesia
evangélica.
He hablado en convenciones carismáticas donde miles de
santos de Dios “llenos del Espíritu” levantaban sus manos en alabanza y
adoración a Dios – y después de ser despedidos, un tropel de ellos salen al
estacionamiento, abren el baúl de los autos y sacan cervezas en paquetes de media
docena y los pasan a sus compañeros feligreses. Otros piden bebidas mezcladas
con sus comidas en restaurantes, entre las secciones de alabanza. Ellos
regresan a hablar con “lenguas picadas.
En sus banquetes hay arpas, vihuelas, tamboriles, flautas y
vino, pero no miran la obra de Jehová, ni consideran la obra de sus manos.”
(Isaías 5:12).
El profeta Isaías tiene un mensaje para todo el movimiento
carismático – tanto en los círculos Católicos como en los Protestantes.
“Por tanto, mi pueblo es llevado cautivo, porque no tiene
conocimiento,... Pero Jehová de los ejércitos será exaltado en juicio; el Dios
Santo será santificado con justicia.” (Isaías 5:13-16).
El profeta Óseas dijo, “Fornicación, vino y mosto quitan el
juicio.” (Óseas 4:11). Esto sugiere que los santos que sorben tienen los
corazones divididos.
Las personas llenas del Espíritu reclaman que son “reyes y
sacerdotes” al Señor. La Biblia declara enfáticamente, “...no es digno de reyes
beber vino, ni de príncipes darse a la sidra; pues quizá bebiendo olviden la
Ley...” (Prov. 31:4-5).
El escritor de Proverbios sugiere que cristianos vencedores
y felices no necesitan vino, eso es solo para los deprimidos y moribundos.
“Dad la sidra al desfallecido y el vino al de ánimo
amargado:..” (Prov. 31:6).
Una refinada dama cristiana me escribió diciendo: “Somos
buenos cristianos que asistimos a la iglesia. Amamos al Señor y no vemos nada
malo en servir vino en nuestro hogar. Bebemos moderadamente y nuestros hijos
están aprendiendo a beber bajo nuestra supervisión. Ellos no se exceden. Nunca
hemos visto a nadie borracho en nuestro hogar.
“Usted simplemente esta tratando de hacernos sentir
culpables y esta empujando su moral fundamentalista sobre nosotros. Nosotros no
fuimos criados bajo los tabúes legalistas como evidentemente lo fue usted.
¡Francamente, señor, nuestro hábito de bebidas no es asunto suyo!”
Dios bendiga a esa querida dama – pero uno de estos días
será asunto mío. Comienza a ser asunto mío cuando esos adolescentes salen con
sus amigos y se emborrachan.
Esta jovencita comenzó a ir a fiestas de adolescentes y
comenzó a beber socialmente con su grupo. Eso la llevo a beber en clubes.
Pronto se estaba emborrachando en camionetas estacionadas. Finalmente, cuando
los problemas se le amontonaban, ella comenzó a depender excesivamente del
vino. Termino en una institución mental, una alcohólica intransigente.
¿Tengo algún prejuicio? ¿Tengo la mente cerrada? ¡Por
supuesto, que sí! Y tengo razón para serlo. Mi propio hermano, hijo de un
ministro comenzó a beber cerveza moderadamente – solo para ser sociable con sus
amigos. Terminó un bebedor, dejó a su esposa y sus bellos hijos para seguir el
vicio. Gracias a Dios que esta salvo hoy y regresó con su familia.
Pero yo envié a mi hermano Jerry con un equipo de
convertidos a Europa a testificar de lo que Cristo hizo libertándolo del poder
del alcohol. Los cristianos en Europa se regocijaron en los testimonios de
liberación de las drogas y la prostitución – pero ellos no quisieron escuchar
una palabra de la liberación de Jerry del alcohol. ¿Por qué? Porque los
cristianos europeos toman vino y cerveza como agua. Eso rompió mi corazón.
He escuchado todas las excusas por la bebida entre los
cristianos en Europa – y no puedo aceptar ninguna de ellas. Culpan el agua
impura. Dicen que es parte de su cultura y costumbres. Ellos beben “porque
siempre lo han hecho.”
Cuán profundamente ofendidos estuvieron los pastores en
Paris, Francia, cuando me negué a tomar su vino. ¡Misioneros americanos,
quienes adoptaron las costumbres europeas, me dijeron que debo hacer “como
hacen los parisienses, mientras este en Paris!” Sin embargo, cuán profundamente
herido estaba yo cuando algunos de estos mismos ministros estaban tan borrachos
que se no podían mantener despiertos durante mi cruzada.
Dondequiera que ves a los adolescentes emborrachándose,
ellos dicen – “Ningún policía, ningún pariente, ningún político nos puede
molestar – porque todos ellos lo están haciendo también. ¡Finalmente
encontramos algo que no nos pondrá detrás de las rejas!”
No quiero involucrarme en el antiguo argumento de la Biblia
y el vino fermentado comparado con el jugo de uva. Pero mientras más veo a
estos jóvenes, explotados y quebrantados – más convencido estoy que Jesús no se
mofó de esa muchedumbre en la fiesta de bodas en Canaán con la misma cosa que
está destruyendo a nuestra juventud hoy en día.
¡Cristo vino a cumplir la ley! La ley dice, “el vino es
escarnecedor... ninguno que por su causa yerre es sabio” ¿Estaba Cristo
engañado? ¿Serviría él una bebida que llevaría al hombre a salir borracho de la
fiesta a calentar a su esposa? Y en la corte le preguntarían a ese hombre,
“¿Cómo llego a estar tan borracho?” Y el hombre culpado contestaría, Estuve en
un banquete de bodas y Jesús de Nazaret sirvió una bebida fuerte. Él me
emborrachó.”
Yo no puedo concebir que Jesús burlara a esa muchedumbre y
serviría una bebida que pudiera ser abusada si se tomaba sin moderación. Yo
creo que el elixir que Jesús sirvió fue el jugo puro de la viña – ¡un ponche
sobrenatural tan lleno de la verdadera mezcla de la naturaleza, que era único y
un cambio aceptado! ¿Añadiría Jesús alcohol al contenido de Su bebida
sobrenatural y hacerle “picar” cuando la ley dice – “No mires al vino cuando
rojea, cuando resplandece su color en la copa, se entra suavemente…”
(Proverbios 23:31)?
Eso fue escrito por un rey que “se había entregado al vino”
(Ec. 2:3). Y Cristo, nunca, nunca les hubiese dado vino a sus invitados que
fuera intoxicante. Pablo también conocía la ley. Él reverenciaba la sabiduría
de Salomón. ¡El jugo puro de la uva es bueno para la salud! Es nutritivo. Pero
el vino fermentado ya no es nutritivo, según un doctor amigo mío quien es bien
leído sobre el tema. ¿Cómo Pablo podía recomendar bebida alcohólica cuando la
ley que él respetaba advertía, “…no estés con los bebedores de vino…”?
Pero el verdadero asunto no es si el Nuevo Testamento se refiere
a vino fermentado o al jugo de uva. El verdadero asunto es el abuso tan
prevalente en la actualidad. Salomón tuvo tres mil esposas. En un tiempo,
Moisés permitió el divorcio. ¡Dios guiño! Pero Dios no guiña cuando sus leyes
son tan pervertidas y abusadas. Mira hasta donde nos ha llevado nuestro
permisivo: a los llamados clubes cristianos, donde aparece la cerveza y baile a
música cristiana. “Cristianos” que ‘rockean’ y beben. “…si acaso beben y
olvidan la ley...”
Estamos olvidando las leyes de Dios, las mismas leyes que
Jesús dijo que él vino a cumplir. Ahora permitimos que un sacerdote lesbiano
sea ordenado en la iglesia Episcopal. Los homosexuales no solo hacen alarde de
sus pecados, ellos audazmente buscan reconocimiento y el poder en la iglesia.
Los cristianos,
¿beben por ignorancia? ¿Es que nadie los ha retado con la Palabra de Dios? ¿Es
que estos nuevos convertidos del movimiento Jesús beben para demostrar que son
liberados y no están bajo la ley?
Me siento muy cansado
y espiritualmente indignado cuando los cristianos bebedores vuelven con – “Ah,
tú eres un fundamentalista, atado a la ley, un moral bonachón. Nosotros los
cristianos liberados estamos libres en Cristo. No estamos bajo la ley. No seremos
atado por tus ataques a nuestra libertad.”
Eso ofende todo lo que en mi anhela devoción y santidad. Eso
ofende a todo joven convertido a quien Dios ha convencido de hábitos pasados de
bebida. Y la Biblia dice – “Y cualquiera que haga tropezar a algunos de estos
pequeños que creen en mi, mejor fuera que se le colgase al cuello una piedra de
molino de asno, y que se le hundiese en lo profundo del mar. ¡Ay del mundo por
los tropiezos! porque es necesario que vengan tropiezos, pero ¡ay de aquel
hombre por quien viene el tropiezo! (Mateo 18:6-7).
Me niego a dejarme vencer por las crecientes presiones de
mundanalidad – ¡disfrazada de libertad espiritual! ¿Qué nos ha pasado, santos
de Dios – cuando nos podemos sentar libremente sin reprender la rápidamente podrida
moral en la casa de Dios?
Yo creo en la gracia libre, pero no en el libertinaje. Yo
creo en la impuesta rectitud de Cristo, por fe. Pero también creo que la
santidad de Dios exige que nosotros “no toquemos lo inmundo.”
También creo que los ministros que fuman no están siendo
honestos con Dios. Estos “profetas que resoplan” se niegan a practicar lo que
predican. Y los ministros que beben son un reproche al nombre y poder de Dios.
No es un esfuerzo condenar a los verdaderos ministros del
evangelio. Pero, nosotros como ministros y padres, ¿cómo podemos pedirles a
nuestros hijos que dejen las drogas y el alcohol, si nosotros no limpiamos
nuestras propias vidas – y somos un ejemplo de Cristo?
A veces, solo por un momento fugaz, pienso en mi mismo, “A lo
mejor yo soy el equivocado. A lo mejor estos nuevos cristianos que ‘rockean’,
fuman, beben y quienes vuelven a sus lugares favoritos a cantar, a entretenerse
y a actuar – a lo mejor ellos han visto algo en Dios que yo aun no he visto.
Quizás todos estos cambios rápidos no son compromiso, sino una señal de madurez
y crecimiento. Quizás soy muy anticuado – demasiado fuera de las cosas para no
reconocer alguna cosa nueva que Dios esta haciendo.”
Pero entonces comienzo a comparar los sonidos bulliciosos de
su música con las viejas canciones como “La Vieja Cruz,” y “Santo, Santo,
Santo.” ¡Entonces quiero llorar! Los veo volver a esos clubes llenos de humo
para entretener a la borracha multitud con la farsa de que llevan a Jesús con
ellos, y entonces los comparo con todos los millones del pueblo de Dios a
través de los siglos desde los mártires hasta los adictos y miembros de gangas
convertidos de hoy, quienes dejaron el mundo y todas sus asociaciones para
tomar el reproche de Cristo. Comienzo a gemir por esos cristianos
comprometidos. Yo sé que no estoy equivocado.
Por favor, ¡no te enojes conmigo! Si tú eres uno de los
santos que beben a sorbos – no permitas que tu herida o rabia te roben de la
verdad. Si te sientes molesto con este mensaje de separación – probablemente es
porque Dios ya te ha convencido – y ahora él quiere que disfrutes de completa
libertad.
Ora para que Dios lo ponga en el corazón de ministros por
toda la nación – para tomar una posición audaz en sus pulpitos contra esta
insidiosa tendencia.
¡Ora por nuestros adolescentes! Las presiones en ellos para
que beban con los demás esta empeorando diariamente. Ellos necesitan ser
animados a tomar su posición y resistir, a no ser que sean arrastrados por este
torbellino de borrachera.
Aunque no te sientas “convencido” – ¡abstente por la
sencilla y poderosa razón de poner un ejemplo ante la juventud!
“¿Para quién será el ay? ¿Para quién el dolor? ¿Para quién
las rencillas? ¿Para quién las quejas? ¿Para quién las heridas en balde? ¿Para
quién lo amoratado de los ojos? Para los que se detienen mucho en el vino, para
los que van buscando la mistura. No mires al vino cuando rojea, cuando
resplandece su color en la copa. Se entra suavemente; mas al fin como serpiente
morderá, y como áspid dará dolor. Tus ojos mirarán cosas extrañas, y tu corazón
hablará perversidades.” (Proverbios 23:29-33).
RECORDANDO DOS AVIVAMIENTOS
Avivamiento en Corea, (1907)
Avivamiento en Chile, (1909)
Valparaíso fue una de las primeras ciudades fundadas por los españoles. Había un hombre llamado Dr. Willis Hoover, un misionero norteamericano, quien al terminar sus estudios en medicina, se sintió llamado a entrar en la pastoral de misiones. El Dr. Hoover vivía en Chicago, Estados Unidos, donde existía una iglesia que estaba experimentado un avivamiento que impresionó a Hoover y a su esposa. Hoover se fue para Chile a pastorear la iglesia metodista de Valparaíso. Hoover comenzó a buscar para su iglesia lo que había visto en Chicago. Durante un año estudiaron el libro de los Hechos en la Escuela Dominical y cien personas recibieron al Señor. En 1907, la señora Hoover recibió un folleto escrito por una amiga misionera en la India, titulado “El bautismo del Espíritu y de fuego”. Este folleto les llamó la atención, y como pareja, comenzaron a orar por una experiencia espiritual más rica para su iglesia en Valparaíso. Después de que un terremoto en 1906 destruyera el templo, en diciembre de 1908 inauguraron su nuevo templo; decididos a pasar mucho tiempo juntos en oración. En una de las vigilias, mientras el Dr. Hoover caminaba cerca del altar cantando un himno, comenzó a llorar, temblar y luego reírse; para él, una señal de Dios de que el avivamiento estaba comenzando. Siguieron haciendo vigilias y en las reuniones Dios convenció a varias personas de sus pecados, lo que resultó en mucho arrepentimiento, restitución y reconciliación. Niños y adultos vieron visiones. La iglesia estaba creciendo: a principios de año, contaban con una membresía de trescientos, y para diciembre había aumentado a mil. Este avivamiento tuvo un carácter más congregacional, aunque otras iglesias fueron afectadas también.
En la última década de 1800’s e inicios de años 1900’s, el evangelio llegó a Corea en un momento de gran necesidad espiritual. Grupos de misioneros llegaron estableciendo obras en ciudades como Pyongyang.
En su debido momento, los coreanos comenzaron a pastorear las iglesias, mientras los misioneros desempeñaban un rol supervisor o entrenador. Dos mil iglesias fueron establecidas en los primeros quince años. Cada año, la iglesia presbiteriana organizaba dos semanas de clases bíblicas para los líderes. En ese momento de la historia los creyentes estaban preocupados por la estabilidad política del país y por la expectativa creada por la entrega de la iglesia en manos de los coreanos.
En el último día de la conferencia, Dios se movió de forma especial. Después de un corto sermón, de repente, varias personas se pusieron de pie; una tras otra confesando sus faltas y toda la congregación comenzó a orar al unísono. No había desorden, más bien reinaba una armonía de personas hablando intensamente con su Creador.
Muchas personas, bajo fuerte convicción de pecado, comenzaron a llorar. Hombre tras hombre se puso en pie para confesar algún pecado, y luego se tiraron en el piso en agonía de convicción. La reunión siguió hasta las dos de la mañana. En el último culto, durante el mensaje, una persona confesó su pecado, y de repente centenares de hombres se encontraban llorando y orando al unísono.
Un anciano de la iglesia se subió al púlpito a confesar su pecado de pelear contra Dios y odiar a sus hermanos. Al pedir perdón, el Espíritu Santo descendió grandiosamente como una avalancha de poder. La intensidad de la obra del Espíritu de Dios mina las fuerzas de varios, quienes caen casi inconscientes ante el altar. Esta fue la última reunión de clases de los líderes. Durante los siguientes meses la llama del avivamiento ardió por todo Corea.
Hubo arrepentimiento por todo lado, las personas confesaba sus pecados, devolvían cosas que habían robado. El énfasis de este avivamiento fue penitencial. Una vez que alguien sentía la convicción de pecado, no podía descansar hasta confesar su pecado, y si era posible, reparar los daños. Antes de recibir las riendas de su destino, la iglesia coreana fue purificada y renovada por una visitación singular de Dios. Esto llevó a que se despertara un celo por la obra misionera para llevar el evangelio a partes todavía sin Cristo. En dos meses, se convirtieron dos mil personas, para julio 1907 aumentaron a treinta mil los convertidos. Corea llegó a ser el país más evangelizado de Oriente.
Después de esto, la iglesia sufrió persecución a manos de los japoneses. Posteriormente, Corea se dividiría en Corea comunista, en el norte, y Corea del Sur. Los creyentes del norte sufrieron la cruel persecución del régimen comunista; hubo muchos mártires que murieron por su fe en Jesucristo. La persecución ha servido para mantener vibrante a esta iglesia. Durante todos estos años la iglesia coreana se ha caracterizado por ser una iglesia que ora. Entre 1903 y 1908, la membresía se cuadruplicó. La predicación y la enseñanza de los pioneros fue bíblica y los hermanos recibieron entrenamiento sistemático en las Escrituras. Dios descendió para santificar a su pueblo e impulsarlo a salir en evangelismo y misiones.
En su debido momento, los coreanos comenzaron a pastorear las iglesias, mientras los misioneros desempeñaban un rol supervisor o entrenador. Dos mil iglesias fueron establecidas en los primeros quince años. Cada año, la iglesia presbiteriana organizaba dos semanas de clases bíblicas para los líderes. En ese momento de la historia los creyentes estaban preocupados por la estabilidad política del país y por la expectativa creada por la entrega de la iglesia en manos de los coreanos.
En el último día de la conferencia, Dios se movió de forma especial. Después de un corto sermón, de repente, varias personas se pusieron de pie; una tras otra confesando sus faltas y toda la congregación comenzó a orar al unísono. No había desorden, más bien reinaba una armonía de personas hablando intensamente con su Creador.
Muchas personas, bajo fuerte convicción de pecado, comenzaron a llorar. Hombre tras hombre se puso en pie para confesar algún pecado, y luego se tiraron en el piso en agonía de convicción. La reunión siguió hasta las dos de la mañana. En el último culto, durante el mensaje, una persona confesó su pecado, y de repente centenares de hombres se encontraban llorando y orando al unísono.
Un anciano de la iglesia se subió al púlpito a confesar su pecado de pelear contra Dios y odiar a sus hermanos. Al pedir perdón, el Espíritu Santo descendió grandiosamente como una avalancha de poder. La intensidad de la obra del Espíritu de Dios mina las fuerzas de varios, quienes caen casi inconscientes ante el altar. Esta fue la última reunión de clases de los líderes. Durante los siguientes meses la llama del avivamiento ardió por todo Corea.
Hubo arrepentimiento por todo lado, las personas confesaba sus pecados, devolvían cosas que habían robado. El énfasis de este avivamiento fue penitencial. Una vez que alguien sentía la convicción de pecado, no podía descansar hasta confesar su pecado, y si era posible, reparar los daños. Antes de recibir las riendas de su destino, la iglesia coreana fue purificada y renovada por una visitación singular de Dios. Esto llevó a que se despertara un celo por la obra misionera para llevar el evangelio a partes todavía sin Cristo. En dos meses, se convirtieron dos mil personas, para julio 1907 aumentaron a treinta mil los convertidos. Corea llegó a ser el país más evangelizado de Oriente.
Después de esto, la iglesia sufrió persecución a manos de los japoneses. Posteriormente, Corea se dividiría en Corea comunista, en el norte, y Corea del Sur. Los creyentes del norte sufrieron la cruel persecución del régimen comunista; hubo muchos mártires que murieron por su fe en Jesucristo. La persecución ha servido para mantener vibrante a esta iglesia. Durante todos estos años la iglesia coreana se ha caracterizado por ser una iglesia que ora. Entre 1903 y 1908, la membresía se cuadruplicó. La predicación y la enseñanza de los pioneros fue bíblica y los hermanos recibieron entrenamiento sistemático en las Escrituras. Dios descendió para santificar a su pueblo e impulsarlo a salir en evangelismo y misiones.
Avivamiento en Chile, (1909)
Valparaíso fue una de las primeras ciudades fundadas por los españoles. Había un hombre llamado Dr. Willis Hoover, un misionero norteamericano, quien al terminar sus estudios en medicina, se sintió llamado a entrar en la pastoral de misiones. El Dr. Hoover vivía en Chicago, Estados Unidos, donde existía una iglesia que estaba experimentado un avivamiento que impresionó a Hoover y a su esposa. Hoover se fue para Chile a pastorear la iglesia metodista de Valparaíso. Hoover comenzó a buscar para su iglesia lo que había visto en Chicago. Durante un año estudiaron el libro de los Hechos en la Escuela Dominical y cien personas recibieron al Señor. En 1907, la señora Hoover recibió un folleto escrito por una amiga misionera en la India, titulado “El bautismo del Espíritu y de fuego”. Este folleto les llamó la atención, y como pareja, comenzaron a orar por una experiencia espiritual más rica para su iglesia en Valparaíso. Después de que un terremoto en 1906 destruyera el templo, en diciembre de 1908 inauguraron su nuevo templo; decididos a pasar mucho tiempo juntos en oración. En una de las vigilias, mientras el Dr. Hoover caminaba cerca del altar cantando un himno, comenzó a llorar, temblar y luego reírse; para él, una señal de Dios de que el avivamiento estaba comenzando. Siguieron haciendo vigilias y en las reuniones Dios convenció a varias personas de sus pecados, lo que resultó en mucho arrepentimiento, restitución y reconciliación. Niños y adultos vieron visiones. La iglesia estaba creciendo: a principios de año, contaban con una membresía de trescientos, y para diciembre había aumentado a mil. Este avivamiento tuvo un carácter más congregacional, aunque otras iglesias fueron afectadas también.
Myles MUnroe
¿RELIGIÓN O REINO?
La religión es la fuerza más poderosa en la tierra. A pesar de los reclamos de muchos, todos en la tierra son religiosos. La religión es definida como la adherencia a un conjunto de las creencias que regulan la moraleja, la conducta social y ritualista del individuo. Esta definición incluiría al ateo, el laicista, el comunista, el socialista, el humanista o el agnóstico, porque todos adhieren a un sistema de creencias de alguna clase, aunque no haya componente providencial de la creación ni de la vida como nosotros lo sabemos, ni una creencia en el poder humano como la medida suprema de la verdad y la justicia.
Cada gran problema en la historia y en nuestro mundo contemporáneo puede ser trazado con alguna base religiosa. La religión ha motivado la masacre de millones de personas a través de los años en las Cruzadas, la Inquisición, y las guerras relacionados a la Reforma y Contrarreforma, y más cercano, los atentados terroristas, como el de las torres gemelas. La esclavitud, la limpieza étnica, el apartheid, la segregación, la discriminación racial, y otras prácticas opresivas han sido justificadas por algún código o sistema religioso.
Cuán irónico es entonces, la religión… se supone que tiene que proporcionar la solución a los problemas de la humanidad y dar la esperanza y la fe para la vida, sin embargo crearon más problemas a través de la historia que lo que han resuelto. Quizás esta es la razón del por qué tantas personas se han alejado de todas las formas de religiones institucionalizadas y optado por abrazar filosofías como el humanismo, el comunismo, y el agnosticismo.
La religión nunca puede satisfacer el hambre profundo en el corazón del hombre. La religión en si misma es la búsqueda. Ninguna religión puede sustituir el reino o llenar el vacío en el alma del hombre. El hambre del corazón humano es por el reino perdido.
En el primer libro de Moisés, el gran escritor hebreo, estas palabras explican la razón para la búsqueda de la humanidad del propósito y el poder: “y Dios dijo: Hagamos al ser humano a nuestra imagen y semejanza. Que tenga dominio sobre los peces del mar, y sobre las aves del cielo; sobre los animales domésticos, sobre los animales salvajes, y sobre todos los reptiles que se arrastran por el suelo.” (Génesis 1:26)
Esto documenta la declaración más importante jamás hecha con respecto a la humanidad. Declara el motivo, la naturaleza, el propósito, y el mandato detrás de la creación de la humanidad. Marca que el dominio es el propósito para la creación y existencia del hombre. La palabra “dominio” aquí se traduce en hebreo mam-lakah, que puede ser traducido también como “el reino,” “la regla soberana,” o el “poder real”. En esencia, la humanidad fue creada para tener reinado sobre la tierra. Por eso el fracaso de la humanidad consiste en la pérdida de su dominio sobre la tierra por la desobediencia a su Creador.
La Biblia y Jesús
La Biblia habla de una familia real puesta bajo el mandato de colonizar la tierra de los cielos. Esta tarea del reino es la prioridad de Dios el Creador y el objeto de la búsqueda inherente de la humanidad. El Rey de este reino es Jesús, cuyo mensaje, tarea, pasión, y propósito fueron de no establecer una religión de rituales y reglas sino reintroducir un reino. Todo lo que Jesús dijo e hizo—Sus oraciones, las enseñanzas, las curaciones, y los milagros—fue enfocado en un reino, no una religión. Para Jesús el Reino fue Su prioridad absoluta.
KATHRYN KUHLMAN
Kathryn
Johanna Kuhlman nació el 9 de mayo de 1907, en Concordia, Missouri,
Estados Unidos. De padres alemanes, Joseph Adolph y Emma Walkenhorst
Kuhlman; ella fue la tercera de cuatro hijos: : Myrtle, Earl, Kathryn
and Geneva. Kathryn se convirtió al cristianismo en 1921, en una reunión
de avivamiento celebrada en una Iglesia Metodista, en la que predicó un
evangelista bautista, el Reverendo Hummel.
En
1923, Kathryn terminó el décimo grado de bachillerato, que era el grado
de educación pública disponible en la ciudad de Concordia. Su hermana
Myrtle se había casado con un evangelista itinerante del Instituto
Bíblico Moody, Everette B. Parrott., y les pidió a sus padres que
permitieran a Kathryn acompañarlos durante el verano. Kathryn ayudaba en
los servicios compartiendo su testimonio en las reuniones de
avivamiento.
Ella
continuó con los Evangelistas Parrots por cinco años, durante los
cuales fueron influenciados por el Dr. Price, evangelista canadiense,
quien les enseñó acerca del bautismo del Espíritu Santo, y como
resultado iniciaron un ministerio de sanidad.
2. LA PRIMERA PARTE DEL MINISTERIO
En
1928, en Boise, Idaho, tuvo Kathryn su primera oportunidad de predicar.
El equipo de trabajo en aquella epoca estaba integrado por: los
Parrots, Kathryn Kuhlman, y la pianista Helen Gulliford. Después,
Kathryn y Helen aceptaron la invitación del pastor de una iglesia
pequeña de Boise, para permanecer y trabajar allí. Kathryn dirigía la
predicación y Helen la música. Viajaron a través del Estado de Idaho y
otras partes del país por los siguientes cinco años.
En
1933, Kathryn y Helen se trasladaron a la ciudad de Pueblo, Colorado,
en donde celebraron reuniones en un almacén de Montgomery Ward por seis
meses. Impulsada por este hombre de negocios, fue a Denver y comenzó a
celebrar reuniones en otro almacén de él. Poco tiempo después se
trasladó a la bodega de la Compañía “Monitor Paper”, y en 1935 se
trasladaron a un garaje abandonado al cual llamaron “El Tabernáculo de
Avivamiento de Denver”. Allí empezaron a crecer los diferentes programas
del ministerio: la escuela dominical, la sociedad de damas y un
programa de radio de quince minutos llamado “Sonriendo a pesar de…”, en
la estación KVOD
Kathryn
Kuhlman compartió su ministerio de predicación en Denver con muchos
evangelistas visitantes, y fue a través de esas visitas que conoció al
Evangelista Phil Kerr, quien entre otros temas predicaba sobre sanidad
divina y cuya influencia llegó a ser, más adelante, muy significativa.
3. EL TIEMPO DIFICIL
En
1937, conoció al evangelista Burroughs A. Waltrip con quien contraería
matrimonio algún tiempo después, con efectos devastadores para el
ministerio porque Waltrip había dejado a su esposa e hijos en Texas, y
recientemente su esposa había obtenido el divorcio. A pesar de los
ruegos de los amigos Kuhlman y Waltrip se casaron en 1938, dando inicio a
un período en el que ambos perdieron sus ministerios. Después de seis
años de casados, Kathryn finalmente dejó a Waltrip en 1944, y en 1948 Waltrip se divorció de ella.
El
primer lugar al que fue Kathryn Kuhlman después de su separación fue la
ciudad de Franklin, Pennsylvania, donde trabajó arduamente para
restablecer su ministerio de predicación.
4. EL MINISTERIO DE SANIDAD
El
momento crucial vino en 1946 cuando fue invitada por Matthew J.
Maloney, del Tabernáculo del Evangelio en la ciudad de Franklin,
Pennsylvania para que volviera a conducir una serie de reuniones de
predicación, y comenzó también a predicar en emisiones de radio de la
estación WKRZ en la cercana ciudad de Oil City. A los pocos meses, su
programa había sido incluido en el horario de WPGH, una estación radial
de Pittsburgh. En 1948, Kuhlman comenzó a celebrar reuniones en ciudades
vecinas, incluyendo Pittsburgh.
En la fase anterior de su ministerio, Kathryn era una evangelista cuya predicación se limitaba al mensaje
de
salvación; pero ahora predicaba sobre sanidad, y llamaba a la gente al
frente no solo para recibir a Cristo sino también para ser sanada. En
1947, Katrhyn Kuhlman predicó su primera serie sobre el Espíritu Santo.
Durante la primera reunión una mujer fue sanada de un tumor mientras que
escuchaba la predicación y más adelante también se sanó un hombre.
Estos acontecimientos marcaron el principio de su ministerio de sanidad.
En
1943 se trasladó a Pittsburgh, inicialmente para una serie de seis
semanas de predicación. Allí conoció a Maggie Hartner, quien más tarde
llegaría a ser su secretaria y amiga cercana. Fue a través de la
influencia de Maggie que, en 1948, Kathryn Kuhlman decidió celebrar una
serie de reuniones en el teatro Carnegie Hall de Pittsburgh. Los
servicios fueron muy exitosos y finalmente en 1950 el ministerio se
movió a Pittsburgh, donde y allí continuó hasta 1971. A pesar de la
buena prensa que recibió y del cariño que le prodigaron muchas personas
de la ciudad, algunos pastores locales estaban celosos pensando que ella
les quitaría miembros de sus congregaciones. Ella sobrevivió todos los
ataques, incluyendo los debates con un Ministro que no creía en la
validez de las sanidades y que consideraban impropio que una mujer fuera
predicadora. (Kathryn Kuhlman fue ordenada en 1968 por la Alianza de
Iglesias Evangélicas).
hasta 1975. En
1965, impulsada por los Pastores Ralph y Elaine Wilkersson, Kathryn
Kulhman amplió su ministerio a California, iniciando con una reunión en
Pasadena. Poco después comenzó a celebrar reuniones en el Shrine
Auditorium de la ciudad de Los Ángeles, en donde ministró
En
1973, llevó a cabo su primer servicio en Ottawa, Canadá, por
insistencia de Maudie Phillips, quién había viajado a Pittsburgh para
los servicios de Katheryn desde principios de 1969. Desde 1973 Maudie
coordinó los servicios de Kathryn Kuhlman en un gran número de ciudades
alrededor de los Estados Unidos.
Los servicios de Kathryn Kuhlman se caracterizaban por:
• Cánticos de alabanza e himnos inspirados
• Un mensaje sobre la necesidad "de nacer de nuevo"
• El poder del Espíritu Santo fluyendo en unción de sanidad a través de todo el auditorio
• Personas que venían al frente a dar el testimonio de su sanidad durante el servicio
• Kathryn Kuhlman imponiendo mano sobre enfermos, que caían al piso bajo el poder de Dios
• Ella nunca se atribuía las sanidades sino que daba testimonio que solo Dios sana.
• Un mensaje sobre la necesidad "de nacer de nuevo"
• El poder del Espíritu Santo fluyendo en unción de sanidad a través de todo el auditorio
• Personas que venían al frente a dar el testimonio de su sanidad durante el servicio
• Kathryn Kuhlman imponiendo mano sobre enfermos, que caían al piso bajo el poder de Dios
• Ella nunca se atribuía las sanidades sino que daba testimonio que solo Dios sana.
Ella
fue una gran impulsora del movimiento carismático, era predicadora
invitada a los eventos de los Hombres de Negocios del Evangelio
Completo, conducía Convenciones Carismáticas
en Melodyland, el mayor centro carismático de California, dirigido por
el Pastor Ralph Wilkersson, y en todas partes animaba a las personas a
que buscaran el bautismo del Espíritu Santo y hablaran en lenguas.
Adquirió
celebridad debido a las asombrosas sanidades que ocurrían en sus
servicios; a los programas de televisión que empezó a difundir desde
1965 en el CBS; a los artículos publicados en las revistas CHRISTIANITY
TODAY y TIME; y a las entrevistas televisivas con Johnny Carson y Mike
Douglas, entre otros.
Kathryn
Kuhlman fue honrada en la 25a. celebración del aniversario de su
trabajo en Pittsburgh; la universidad Oral Roberts le concedió un
doctorado Honoris Causa en 1972; le dieron las llaves de las ciudades de
Pittsburgh y St. Louis; fue nombrada miembro honorario en el capítulo
de Nueva York de los Hombres de Negocios del Evangelio Completo; y causó
un profundo impacto espiritual y de sanidad en la vida de miles de
personas.
Los
problemas de salud de Kathryn Kuhlman, relacionados con su corazón
agrandado, fueron diagnosticados por primera vez en 1955, pero llegaron a
ser más severos en los últimos años de su vida. Contribuyó a agravar
esta dolencia, la tensión de un horario muy pesado, particularmente en
los años 70, cuando su itinerario se amplió y dirigía servicios en
Pittsburgh, Los Ángeles, y visitaba muchas otras ciudades también. Ella
también continuó con su ministerio de la televisión, con las visitas a
instituciones apoyadas por la Fundación Kuhlman, y además tuvo que
afrontar un graveconflicto con dos ex – colaboradores en 1975
La
salud de Kathryn Kuhlman declinó dramáticamente, la hospitalizaron
primero en Tulsa durante el verano de 1975 y después en Los Ángeles al
final de ese mismo año; murió el 20 de febrero de 1976 en Tulsa, después
de una cirugía de corazón abierto. Aunque ella murió, su legado siguió
viviendo a través de la Fundación Kuhlman mediante el apoyo a diferentes
misioneros y obras cristianas, incluso hasta 1982 la Fundación continuó
difundiendo sus programas de radio en los Estados Unidos; y hasta el
día de hoy el ministerio de Kathryn Kuhlman sigue inspirando a muchos
siervos de Dios en el mundo entero.
WILLIAM MARRION BRANHAM
Un hombre de notables señales y prodigios
(Cuando Dios enseña a través de éxitos y fracasos)
William Branham estuvo rodeado de sucesos extraordinarios e increíbles. Simple en sus razonamientos, y con escaso dominio del idioma, fue líder del avivamiento de La Voz de Sanidad, a fines de los años ‘40. Ningún evangelista de la sanidad pudo combinar el oficio profético, milagros y la sanidad divina como lo hizo Branham.
William Marrion Branham nació el 6 de abril de 1909, en Kentucky, EE.UU. Esa mañana, de manera repentina, una luz del tamaño de una almohada vino como un remolino por la ventana, giró alrededor de donde estaba el bebé y bajó sobre la cama. Todos quedaron boquiabiertos, preguntándose qué clase de niño había nacido de los Branham.
El viento del cielo Cierto día, mientras Branham llevaba un balde de agua desde el granero hasta la casa, escuchó el sonido del viento soplando en la copa del árbol. Se puso de pie de un salto para mirar, y entonces notó que el viento no soplaba en ningún otro lugar. Dando un paso atrás, miró al árbol y escuchó una voz que decía: "Nunca bebas, fumes, ni contamines tu cuerpo de ninguna forma, porque tengo una obra para que hagas cuando seas mayor". Durante el resto de su infancia, Branham hizo todo lo que pudo para evitar pasar nuevamente junto a ese árbol por el pánico que le había causado.
El tabernaculo Branham En junio de 1933, a los veinticuatro años de edad, Branham realizó su primera gran campaña en una carpa. En una noche asistieron tres mil personas.El 11 de junio realizó un culto de bautismos en el río Ohio, donde bautizó ciento treinta personas.Ese otoño, las personas que habían asistido a sus reuniones construyeron un tabernáculo al que llamaron "Tabernáculo Branham". Desde 1933 hasta 1946, Branham fue el ministro del Tabernáculo, mientras al mismo tiempo trabajaba en un empleo secular.
Dolor y sufrimiento Durante la década del ’30 se casó con una maravillosa joven cristiana. Su nombre era Hope Brumback. Tuvieron dos hijos: Billy Paul y Sharon.En sólo una noche, Branham perdió a dos de las tres personas más preciosas en el mundo para él. Su esposa falleció de tuberculosis y su hija de meningitis. Sólo le quedaba Billy Paul y un dolor imposible de soportar.
El Ángel del Señor vino Branham fue a un lugar apartado a orar y leer la Biblia. Tan profundo era su clamor, que parecía que el alma se le iba a separar del cuerpo. "¿Querrás hablarme en alguna forma, Dios? Si tú no me ayudas, yo no puedo continuar", lloraba.Esa misma noche, notó una luz que parpadeaba en el cuarto. Pensando que alguien estaba entrando con una linterna, miró por la ventana, pero no vio a nadie. Repentinamente, la luz comenzó a extenderse por el suelo. Alarmado, saltó de su silla cuando vio una bola de fuego refulgiendo en el piso. Entonces oyó unas pisadas y vio a un hombre con una túnica blanca que se acercaba.Mientras Branham temblaba de miedo, el hombre habló: "No temas. Fui enviado de la presencia del Dios Todopoderoso para decirte que tu peculiar vida y tus incomprensibles caminos, han sido la forma de indicarte que Dios te ha enviado para llevar el don de la sanidad divina a los pueblos del mundo.Si eres sincero, y haces que la gente crea, nada se interpondrá en tu camino".La primera respuesta de Branham fue como la de Gedeón . Le dijo al ángel que él era pobre e iletrado, y que por ello sentía que nadie aceptaría su ministerio ni lo escucharía.Pero el ángel dijo a Branham que recibiría dos dones como señales para confirmar su ministerio. Primero, podría detectar las enfermedades por medio de una vibración física en su mano izquierda.En años posteriores, Gordon Lindsay fue testigo de este fenómeno sobrenatural.Branham respondió al ángel: "Señor, me temo que no me recibirán". Y el ángel respondió: "Entonces sucederá que conocerás el secreto más profundo del corazón de las personas. Esto lo oirán".Cuando esto ocurría mientras Branham oraba por alguien, él se apartaba del micrófono y hablaba en privado con la persona, la llevándola inmediatamente al arrepentimiento.
Los muertos son resucitados En junio de 1946, Branham regresó a St. Louis y condujo una campaña de doce días en la que predicó y oró por los enfermos. La carpa estaba llena de gente y muchos quedaron afuera, aun bajo lluvias torrenciales. Tremendas manifestaciones se produjeron: los cojos andaban, los ciegos veían, los sordos oían. Un ministro que había sido ciego durante veinte años recibió la vista. Una mujer que rechazó el Espíritu de Dios cayó muerta fuera de la carpa víctima de un ataque al corazón. Branham salió a verla y oró por ella. La mujer se levantó y recibió la salvación en Cristo Jesús. Las sanidades se multiplicaron y se hicieron incontables. Muchas veces Branham se quedaba hasta las 2:00 de la madrugada orando por los enfermos.
Sacudiendo naciones En abril de 1950 Branham viajó a Escandinavia, siendo el primer evangelista de La Voz de Sanidad que viajara a Europa.Branham también había recibido muchos pedidos de oración desde África, algunos de los cuales venían acompañados por boletos de avión. Finalmente, en otoño de 1951, Él y su equipo viajaron a Sudáfrica, donde realizaron campañas hasta diciembre. Se dice que las reuniones fueron las más grandes realizadas en el país, con una asistencia de hasta cincuenta mil personas, y miles que quedaban afuera.
Branham comienza a desviarse Branham fue muy influyente en el ministerio de la sanidad divina durante nueve años. En este tiempo, muchos evangelistas de la sanidad comenzaron a surgir por todo el país, operando con grandes señales y prodigios. La revelación de la sanidad divina había llegado a su punto máximo en todo el mundo. Pero a partir de ese año, los fuegos del avivamiento de sanidad comenzaron a menguar. Para 1955, Branham comenzó a experimentar dificultades, y su ministerio cambió en forma drástica.
Se va Lindsay Gordon Lindsay fue una de las cosas más importantes que le sucedió al ministerio de Branham. Lindsay tenía la Palabra y Branham tenía el don. Lindsay también tenía la capacidad organizativa que podía multiplicar el ministerio y el don
William Marrion Branham nació el 6 de abril de 1909, en Kentucky, EE.UU. Esa mañana, de manera repentina, una luz del tamaño de una almohada vino como un remolino por la ventana, giró alrededor de donde estaba el bebé y bajó sobre la cama. Todos quedaron boquiabiertos, preguntándose qué clase de niño había nacido de los Branham.
El viento del cielo Cierto día, mientras Branham llevaba un balde de agua desde el granero hasta la casa, escuchó el sonido del viento soplando en la copa del árbol. Se puso de pie de un salto para mirar, y entonces notó que el viento no soplaba en ningún otro lugar. Dando un paso atrás, miró al árbol y escuchó una voz que decía: "Nunca bebas, fumes, ni contamines tu cuerpo de ninguna forma, porque tengo una obra para que hagas cuando seas mayor". Durante el resto de su infancia, Branham hizo todo lo que pudo para evitar pasar nuevamente junto a ese árbol por el pánico que le había causado.
El tabernaculo Branham En junio de 1933, a los veinticuatro años de edad, Branham realizó su primera gran campaña en una carpa. En una noche asistieron tres mil personas.El 11 de junio realizó un culto de bautismos en el río Ohio, donde bautizó ciento treinta personas.Ese otoño, las personas que habían asistido a sus reuniones construyeron un tabernáculo al que llamaron "Tabernáculo Branham". Desde 1933 hasta 1946, Branham fue el ministro del Tabernáculo, mientras al mismo tiempo trabajaba en un empleo secular.
Dolor y sufrimiento Durante la década del ’30 se casó con una maravillosa joven cristiana. Su nombre era Hope Brumback. Tuvieron dos hijos: Billy Paul y Sharon.En sólo una noche, Branham perdió a dos de las tres personas más preciosas en el mundo para él. Su esposa falleció de tuberculosis y su hija de meningitis. Sólo le quedaba Billy Paul y un dolor imposible de soportar.
El Ángel del Señor vino Branham fue a un lugar apartado a orar y leer la Biblia. Tan profundo era su clamor, que parecía que el alma se le iba a separar del cuerpo. "¿Querrás hablarme en alguna forma, Dios? Si tú no me ayudas, yo no puedo continuar", lloraba.Esa misma noche, notó una luz que parpadeaba en el cuarto. Pensando que alguien estaba entrando con una linterna, miró por la ventana, pero no vio a nadie. Repentinamente, la luz comenzó a extenderse por el suelo. Alarmado, saltó de su silla cuando vio una bola de fuego refulgiendo en el piso. Entonces oyó unas pisadas y vio a un hombre con una túnica blanca que se acercaba.Mientras Branham temblaba de miedo, el hombre habló: "No temas. Fui enviado de la presencia del Dios Todopoderoso para decirte que tu peculiar vida y tus incomprensibles caminos, han sido la forma de indicarte que Dios te ha enviado para llevar el don de la sanidad divina a los pueblos del mundo.Si eres sincero, y haces que la gente crea, nada se interpondrá en tu camino".La primera respuesta de Branham fue como la de Gedeón . Le dijo al ángel que él era pobre e iletrado, y que por ello sentía que nadie aceptaría su ministerio ni lo escucharía.Pero el ángel dijo a Branham que recibiría dos dones como señales para confirmar su ministerio. Primero, podría detectar las enfermedades por medio de una vibración física en su mano izquierda.En años posteriores, Gordon Lindsay fue testigo de este fenómeno sobrenatural.Branham respondió al ángel: "Señor, me temo que no me recibirán". Y el ángel respondió: "Entonces sucederá que conocerás el secreto más profundo del corazón de las personas. Esto lo oirán".Cuando esto ocurría mientras Branham oraba por alguien, él se apartaba del micrófono y hablaba en privado con la persona, la llevándola inmediatamente al arrepentimiento.
Los muertos son resucitados En junio de 1946, Branham regresó a St. Louis y condujo una campaña de doce días en la que predicó y oró por los enfermos. La carpa estaba llena de gente y muchos quedaron afuera, aun bajo lluvias torrenciales. Tremendas manifestaciones se produjeron: los cojos andaban, los ciegos veían, los sordos oían. Un ministro que había sido ciego durante veinte años recibió la vista. Una mujer que rechazó el Espíritu de Dios cayó muerta fuera de la carpa víctima de un ataque al corazón. Branham salió a verla y oró por ella. La mujer se levantó y recibió la salvación en Cristo Jesús. Las sanidades se multiplicaron y se hicieron incontables. Muchas veces Branham se quedaba hasta las 2:00 de la madrugada orando por los enfermos.
Sacudiendo naciones En abril de 1950 Branham viajó a Escandinavia, siendo el primer evangelista de La Voz de Sanidad que viajara a Europa.Branham también había recibido muchos pedidos de oración desde África, algunos de los cuales venían acompañados por boletos de avión. Finalmente, en otoño de 1951, Él y su equipo viajaron a Sudáfrica, donde realizaron campañas hasta diciembre. Se dice que las reuniones fueron las más grandes realizadas en el país, con una asistencia de hasta cincuenta mil personas, y miles que quedaban afuera.
Branham comienza a desviarse Branham fue muy influyente en el ministerio de la sanidad divina durante nueve años. En este tiempo, muchos evangelistas de la sanidad comenzaron a surgir por todo el país, operando con grandes señales y prodigios. La revelación de la sanidad divina había llegado a su punto máximo en todo el mundo. Pero a partir de ese año, los fuegos del avivamiento de sanidad comenzaron a menguar. Para 1955, Branham comenzó a experimentar dificultades, y su ministerio cambió en forma drástica.
Se va Lindsay Gordon Lindsay fue una de las cosas más importantes que le sucedió al ministerio de Branham. Lindsay tenía la Palabra y Branham tenía el don. Lindsay también tenía la capacidad organizativa que podía multiplicar el ministerio y el don
William Branham,Oral Roberts,Gordon Lindsay |
de Branham. Obviamente, eran un equipo ministerial armado en los cielos.Pero Branham se negó a reconocer el valor de Lindsay. Creo que separarse de él fue un gran error y la causa por la cual este cayó luego en serios errores doctrinales.
No permaneció en su llamadoBranham no tomó bien el cambio. En realidad, nunca vivió la transición. En lugar de orar al Señor para saber cuál sería el lugar donde debería ministrar en el próximo mover de Dios, se volvió hacia doctrinas radicales y sensacionalistas. Tomó el oficio de maestro por voluntad propia, no por orden de Dios.Dios no lo llamó a ser un maestro, porque él no conocía la Palabra. Como consecuencia, a través de su ministerio comenzaron a enseñarse y enfatizarse doctrinas problemáticas.
Lo hizo a su manera Branham decía tener extrañas visiones espirituales que aparentemente hacían que siempre estuviera buscando su cumplimiento con gran ansiedad. Durante la década del ’60, lamentaba la declinación de su popularidad, al notar que otros evangelistas lo habían superado. Entonces su ministerio se convirtió en una carrera competitiva.Branham trató de recuperar su popularidad por medio de la enseñanza de doctrinas que, según él, le habían sido dadas por revelación profética. Pero, al abusar del don, sus profecías se pervirtieron. En lugar de utilizar su capacidad profética para llamar a los corazones de los hombres de regreso a Dios, trató de predecir acontecimientos internacionales.
La historia de su muerte Branham predicó su último mensaje en la semana del Día de Acción de Gracias de 1965.El 18 de diciembre de 1965, mientras regresaba a Indiana cruzando Texas, Billy Paul Branham, su hijo, manejaba el auto que iba delante del de Branham y su segunda esposa. Un conductor ebrio giró para evitar chocar contra el auto de Billy Paul, pero cruzó la línea divisoría del medio y chocó de frente contra el auto de Branham.Billy Paul giró y regresó al lugar del accidente. Saltó de su auto y vio que Branham había atravesado la ventanilla y había vuelto a caer dentro del auto.Billy Paul fue a controlar el estado de su padre y vio que tenía huesos rotos, pero aún tenía pulso. Al controlar el estado de su esposa, notó que no tenía pulso. Obviamente, estaba muerta.Repentinamente, Branham se movió, y al ver a su hijo, le preguntó: "¿Está bien mamá?"Billy Paul le contestó: "Papá, está muerta". Entonces Branham le dijo: "Pon mi mano sobre ella".Su hijo obedeció, puso la mano ensangrentada de Branham sobre su esposa. Inmediatamente le regresó el pulso, y la mujer revivió.William Branham permaneció en coma durante seis días, antes de morir el 24 de diciembre de 1965.
Aprendamos la lección
No permaneció en su llamadoBranham no tomó bien el cambio. En realidad, nunca vivió la transición. En lugar de orar al Señor para saber cuál sería el lugar donde debería ministrar en el próximo mover de Dios, se volvió hacia doctrinas radicales y sensacionalistas. Tomó el oficio de maestro por voluntad propia, no por orden de Dios.Dios no lo llamó a ser un maestro, porque él no conocía la Palabra. Como consecuencia, a través de su ministerio comenzaron a enseñarse y enfatizarse doctrinas problemáticas.
Lo hizo a su manera Branham decía tener extrañas visiones espirituales que aparentemente hacían que siempre estuviera buscando su cumplimiento con gran ansiedad. Durante la década del ’60, lamentaba la declinación de su popularidad, al notar que otros evangelistas lo habían superado. Entonces su ministerio se convirtió en una carrera competitiva.Branham trató de recuperar su popularidad por medio de la enseñanza de doctrinas que, según él, le habían sido dadas por revelación profética. Pero, al abusar del don, sus profecías se pervirtieron. En lugar de utilizar su capacidad profética para llamar a los corazones de los hombres de regreso a Dios, trató de predecir acontecimientos internacionales.
La historia de su muerte Branham predicó su último mensaje en la semana del Día de Acción de Gracias de 1965.El 18 de diciembre de 1965, mientras regresaba a Indiana cruzando Texas, Billy Paul Branham, su hijo, manejaba el auto que iba delante del de Branham y su segunda esposa. Un conductor ebrio giró para evitar chocar contra el auto de Billy Paul, pero cruzó la línea divisoría del medio y chocó de frente contra el auto de Branham.Billy Paul giró y regresó al lugar del accidente. Saltó de su auto y vio que Branham había atravesado la ventanilla y había vuelto a caer dentro del auto.Billy Paul fue a controlar el estado de su padre y vio que tenía huesos rotos, pero aún tenía pulso. Al controlar el estado de su esposa, notó que no tenía pulso. Obviamente, estaba muerta.Repentinamente, Branham se movió, y al ver a su hijo, le preguntó: "¿Está bien mamá?"Billy Paul le contestó: "Papá, está muerta". Entonces Branham le dijo: "Pon mi mano sobre ella".Su hijo obedeció, puso la mano ensangrentada de Branham sobre su esposa. Inmediatamente le regresó el pulso, y la mujer revivió.William Branham permaneció en coma durante seis días, antes de morir el 24 de diciembre de 1965.
Aprendamos la lección
La historia de William Marrion Branham no fue escrita con ánimo de crítica. Creo que contiene una lección muy poderosa : Haz lo que Dios te dice que hagas; nada más, nada menos. No se trata de un juego. Hay un solo movimiento, y le pertenece a Dios. Tu tarea es seguirlo.Sigue su plan, exactamente, todos los días de tu vida, y nunca te desvíes de él por tus propias ideas o por la presión de los demás. Tu unción solo se manifestará cuando sigas el plan que Dios ha diseñado para ti. Adopta su plan, y no te apartes de él en lo más mínimo.
Extraído de "Los Generales de Dios", por Roberts Liardon Editorial Peniel
Extraído de "Los Generales de Dios", por Roberts Liardon Editorial Peniel
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